Yo no soy yo, ¡yo soy un pueblo, carajo! Hugo Chávez Ni los hermanos Castro ni el propio Hugo Chávez, hoy en un estado de salud incierto, podrían haber calculado tan buenos resultados en el proceso político de ese país. Entre el anuncio difuso de su padecimiento, la primera operación en Cuba y la desaparición más reciente del mandatario el 10 de diciembre pasado, se ha construido un ambiente por demás excepcional en que el puro mito ha sido capaz de llenar su ausencia. Y pareciera que entre más se prolonga esta ausencia más poder adquiere el mito entre algunos sectores de la sociedad venezolana. Sin tener por que llamarnos al azoro —se trata de un proceso montado ágilmente desde que Chávez garantizara su inmortalidad—, la perpetuidad del chavismo, si Chávez fallece, parece garantizarse, incluso más allá de la norma constitucional al respecto, que cada quien está interpretando como mejor le conviene. Hanz Dietrich, ideólogo
Investigador Titular en el CISAN-UNAM y profesor de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales en la FCPyS. Fue Profesor-Investigador visitante en el Lateinamerika-Institut de la Frei Universität, Berlin 2013-2015. Colaborador permanente en Deutsche Welle, Berlin. Realizó su Maestría en Sociología Política y el Doctorado en Relaciones Internacionales, por la London School of Economics and Political Science (LSE).