He sostenido en este espacio que el prinicpal reto que Donald Trump tenía era el de dejar de ser el candidato estruendoso, agresivo, colérico y convertirse en un actor político cuyo proceder estuviera a la altura de la alta investidura que es la jefatura del Estado. 22 de Enero de 2017 Después de escuchar y leer su discurso de toma de posesión no creo equivocarme, desafortunadamente, al augurar que Trump seguirá en la línea de provocación que lo ha caracterizado. De entre todas las tareas en las que Trump ha sido eficaz, la de provocar e infundir el miedo a sus contrapartes es quizá la más sobresaliente. El discurso de toma de posesión no se apartó de esta línea de trabajo que Trump ha acometido con cuidado, pero con poca delicadeza desde que compitió con éxito por la Presidencia. En lugar de reivindicar su mote de campaña, “EU primero”, invitando al resto de las naciones a acompañarlo en hacerlo como parte de un esfuerzo compar...

Investigador Titular en el CISAN-UNAM y profesor de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales en la FCPyS. Fue Profesor-Investigador visitante en el Lateinamerika-Institut de la Frei Universität, Berlin 2013-2015. Colaborador permanente en Deutsche Welle, Berlin. Realizó su Maestría en Sociología Política y el Doctorado en Relaciones Internacionales, por la London School of Economics and Political Science (LSE).